« Una espada de acero fiable. Cierta persona intentó usarla como una espada voladora… »
El maestro de la espada descendió de lo más alto de Jueyun de un salto.
Perforó las nubes mientras la tempestad rugía en sus oídos,
a lo que le siguió el sonido de unos huesos rotos.
En ese momento se dio cuenta que hay cosas que el arte de la espada no puede lograr.
Entonces, empeñó la espada para comprar medicina.
¡Pero el maestro de la espada sabía que su vuelo no acabaría ahí!